Todo empezó con una pregunta muy simple:
¿Por qué cambiar de bici, si puedes mejorar la que ya tienes?
Los fines de semana salíamos a rodar, entrenar o simplemente desconectar. Pero al intentar usar la bici entre semana —para ir al trabajo, hacer recados o movernos por la ciudad— siempre aparecían los mismos problemas: cuestas, viento, sudor, cansancio…
Hablamos con cientos de personas que usan, o quieren usar, la bici a diario. Y todos nos decían algo parecido:
“Me encantaría, pero llego hecho polvo y empapado.”
“En mi ciudad hay muchas cuestas.”
“Quisiera hacer más distancia en menos tiempo, sin imprevistos.”
La solución parecía ser la bici eléctrica, pero resultaba cara, pesada, poco flexible o demasiado aparatosa.
Así que decidimos hacer algo. No teníamos un gran presupuesto, ni fábrica, ni inversores. Pero sí teníamos lo más importante: una idea clara y las ganas de llevarla a la calle.
Así nació Spiny
Y seguimos con el mismo propósito: hacer que moverse en bici todos los días sea más fácil, más accesible y más real para miles de personas en todo el mundo.
Esto no va de reinventar la bicicleta. Va de que la que ya tienes te lleve más lejos, más rápido y con menos esfuerzo.

Team






xCruza DIRECTOR








